La educación no se dirige exclusivamente a lo intelectual, que se enfoca en habilitar profesionalmente al estudiante, sino también al desarrollo multidimensional de aquellos aspectos que hacen parte del proceso formativo. El bienestar de los estudiantes, como el de los docentes y el personal que cumple funciones administrativas es factor determinante para incrementar y estimular la convivencia pacífica; fomentar la solidaridad, y propiciar un ambiente para quienes intervienen en el proceso educativo como apoyo a esta función; para que los estudiantes reciban una formación en el respeto de los derechos humanos, a la paz y a la democracia; para el mejoramiento cultural, científico tecnológico y el compromiso con un ambiente sano a fin de que haya mejores prácticas en el trabajo y la recreación.
En ese sentido el Bienestar Universitario, presenta el conjunto de políticas, principios, valores, normas y procedimientos orientados a crear, mejorar y mantener las condiciones que favorezcan el desarrollo integral de la comunidad académica, mediante el apoyo de acciones encaminadas en el campo de la salud, del deporte, la cultura, la espiritualidad y el desarrollo psico-afectivo, elevando así, los niveles de satisfacción, eficacia, eficiencia, efectividad e identificación y sentido de pertenencia con la Fundación Universitaria Claretiana
En ese sentido el Bienestar Universitario, presenta el conjunto de políticas, principios, valores, normas y procedimientos orientados a crear, mejorar y mantener las condiciones que favorezcan el desarrollo integral de la comunidad académica, mediante el apoyo de acciones encaminadas en el campo de la salud, del deporte, la cultura, la espiritualidad y el desarrollo psico-afectivo, elevando así, los niveles de satisfacción, eficacia, eficiencia, efectividad e identificación y sentido de pertenencia con la Fundación Universitaria Claretiana